FOTOS ENCONTRADAS: VIAJE A VENECIA (1986)

A principios de 1986 fui a Venecia por primera vez. En esos años, en mis diecipico, las ganas de viajar y ver mundo se hacían cada vez más imperantes. La curiosidad me comía. Para visitar Venecia, en esta ocasión, me apunté a un viaje organizado que salía desde Barcelona, en autocar, y nos llevaba a un camping cercano a Venecia, desde donde nos acercaban y traían para que camináramos y conociéramos la bella y pintoresca ciudad. Nunca había estado en un viaje organizado, y creo que después no he vuelto a estar, pero la experiencia fue positiva. Lo cierto es que lo pasé muy bien y conocí gente divertida y entrañable. Recuerdo a María, Josep e Isidro. por ejemplo. María andaba de terapias y repetía que le habían recomendado que lo "ventilase" todo, que no se dejara nada dentro... Así sacaba la audacia necesaria para decirnos en la cara todas las frescuras que se le pasaban por la cabeza: a mi me dijo que tenía cara de "chorizo" (delincuente barriobajero, vaya) y a Josep, un trabajador de TV3 muy amable y delicado, que tenía la cara concentrada, ojos, nariz y boca muy juntas... Y se quedaba tan ancha. A mi, la verdad es que me hacía reír muchísimo, me parecía un personaje de una película de Woody Allen. Era tal su delirio que la recuerdo en medio del bungalow que compartíamos Josep, ella y yo, doblando su cuerpo y afirmando que se quedaba sorda de un oído cada vez que hacía ese gesto en ese lugar exacto; o recuerdo que tenía que cogerse a uno de nosotros cada vez que bajábamos las escaleras de un puente porque en los últimos escalones sus piernas no le respondían; o sus ojos que por la noche no se dilataban ante la oscuridad, como los gatos; o su miedo a la gente desconocida que se acercaba a preguntarnos algo.... En una ocasión ella se alejó rápidamente, despavorida, del desconocido dando saltitos como si fuera una niña y tarareando una canción. Yo me partía de risa con ella. Isidro era de Madrid, también un hombre tranquilo y afable. Josep, María y yo nos vimos después en casa de Josep, en Barcelona, para ver las diapositivas del viaje. Creo que ya no nos volvimos a ver nunca más.